En este verano, mis palabras han llegado a Japón, China, Argentina, Escocia, varios países de Europa del Este, Menorca, y planean ser leídas también en Perú y Cuba.
Todo gracias a la movilidad de los móviles de mis colegas y a la interrelación electrónica que permite viajar a mis ocurrencias, pensamientos, fotos y sentimientos.
Me alegra saber que las comunicaciones de mis Whastapperas y Whastapperos también van a volar por la inmensa red hasta