Archivo de la categoría: Reflexiones

Aún dependiente.

No paras, estás en todas, vividor, juerguista, como vives……………..

Bueno si, me voy defendiendo pero, como decía el Señor Lobo en Pulp Fiction: —————. Mejor no lo reproduzco aquí por si hay niños, pero lo que venia a querer expresar es que aún no hay que cantar victoria.

Porque aún sigo sin dirigir mi vida, ni ganármela (los que interactúan en ella decidiendo, eligiendo, optando, acertando y fallando; me parecen participantes de un  juego apasionante).
Sin disponer de mi tiempo para poder improvisar y acudir a donde debo, deseo o necesito estar, sin tener que chupar -como un vampiro- la libertad de otra persona.
Y porque un año más no puedo asistir a La Marcha por la Visibilidad de la Diversidad Funcional, organizada como siempre por el Foro de Vida Independiente.

Ignorante envidia.

Desde hace ya algún tiempo, me vengo dando cuenta de que, a ciertas mentes «sencillas», les cuesta entender e incluso les molesta que las personas en desigualdad de condiciones se nos tenga alguna consideración.

Véase las plazas de parking para personas que nos empeñamos en aumentar nuestra reducida movilidad o, por ejemplo, las zonas que se habilitan para poder ver conciertos sin que nadie se te ponga delante, interfiriendo en tu contacto visual con el escenario.
Más de una vez, me han dicho «jo! Que suerte tenéis». Lo que no sé es si tomármelo a risa o aconsejarle que se corte una pierna para gozar de mis mismos «privilegios». En sus manos está.

Seguir leyendo Ignorante envidia.

Whastapp around the word

En este verano, mis palabras han llegado a Japón, China, Argentina, Escocia, varios países de Europa del Este, Menorca, y planean ser leídas también en Perú y Cuba.

Todo gracias a la movilidad de los móviles de mis colegas y a la interrelación electrónica que permite viajar a mis ocurrencias, pensamientos, fotos y sentimientos.

                   

Me alegra saber que las comunicaciones de mis Whastapperas y Whastapperos también van a volar por la inmensa red hasta

Seguir leyendo Whastapp around the word

Vinceró

Tenia pensado llamar a mi siguiente entrada bloguera «Hibernar en verano» pero, al igual que las estaciones del año que no son del todo puntuales, la pasividad que siempre llega por estas fechas se está demorando.

Las ocupaciones (talleres, deportes adatados -Boccia-) cesan con un reprochable espíritu escolar.
No obstante, esta vez en Sancho Azpeitia nos hemos preocupado porque la caída no sea tan precipitada y hemos organizado aventurillas todas las semanas de Julio,
Agosto será otro cantar, pero bien estará reservar fuerzas para lo que, aún hipotéticamente, viene al final de la época estival; si las fiestas y el sol nos lo permiten.

De todas formas, es inevitable recordar que nuestra vida sigue divida en servicios que cierran por vacaciones que se alargan más de lo necesario, por falta de presupuestos.

Entonces a uno, le vuelven los ataques de desesperación -que nunca cesan- al pensar que el tiempo pasa y sigue sin encontrar la manera de ganarse la vida para ser capaz de acceder a las oportunidades que le surgen y ser competitivo para luchar por lo que más desea, como cualquier ciudadano.

La esperanza y convencimiento de conseguirlo no me faltan. Si me fallarían, no podría encontrar alicientes alternativos. No existen.
Son los ingredientes de la felicidad (reconocido por psicólogos).

En momentos de flaqueza, pongo al gran «Pava» entonando el Nessum dorma de la opera de Turandot de Puccini, y me prometo que venceré!
Así me siento cuando me encuentro a las cuatro de la mañana esperando tranquilamente en el anden del metro, con 0 % de ayuda.

Dos movimientos sexys

Algo se está moviendo «sexymente». Antes de ayer compartí en el «CaraLibo» un video de «Yes, We Fuck», protagonizado por una estupenda mujer con parálisis cerebral, contando sin cortarse ni un pelo,  lo que muchos hemos vivido y lo que seguimos pensando.

No puedo estar más de acuerdo con sus observaciones. Quiero agradecer y reconocer la labor de todos estos activistas revolucionarios, mata conformismos y resignaciones.

Siempre tiene que existir quien abra ojos y mueva mareas. Lo que sucede, en mi opinión, es que es una cuestión de oportunidades. Cada uno opta por la mejor opción y con menos problemas.
En este aspecto, vivimos una especie de Antiguo Régimen en el que los «capaces» avanzan y los demás nos enfrentamos a una cruel selección natural, porque, vete a saber si inconscientemente se piensa que lo nuestro es contagioso o hereditario.

Personalmente, no se si un movimiento podrá con la fuerza de una ley de la naturaleza,  pero un fuerte abrazo para quien lo intenta.. Yo me apunto.

Sin embargo, el tema no decae. Ayer se divulgaba la creación de una asociación Catalana dedicada a promover la asistencia sexual, lo que quiere decir que la concienciación hacia nuestro bienestar se está propagando entre los círculos pensadores, siempre informales -no por instituciones, por supuesto-.

La primera reacción es de alegría. Tener servicios que atiendan nuestras «ganitas», venga! También me apunto!

Pero dándole una vuelta, no puedo dejar de apreciar un cierto ápice caritativo que confirma esa distinción social, donde todo va a depender de encontrar personas dispuestas a dar esos servicios. Por la otra parte, no creo que quede.

Otra vuelta de tuerca más, me lleva a la conclusión de que algo así, bien tratado, puede ayudar a mucha gente a tener una vida más satisfactoria, y que, por lo tanto, merece la pena su expansión.
Lo que más miedo me da es que el fin terapéutico merme el carácter misterioso del sexo.
No me veo yendo con mis padres a un sitio donde me ofrezcan relaciones sexuales recetadas. No me pone la idea..

Se admiten comentarios

Acabo con la ejemplarizante entrevista de Andrea. Felicidades, guapa: