Bilbao 1:36

A ver, aquí hay algo que no me cuadra. Que alguien me explique como puede ser que en Donosti, con un circuito plano como una llanura, hariamos una hora y treintainueve minutos, mientras que en Bilbao, con un trazado serio y repleto de subidas, bajadas, pavimentos de difentes «calidaddes», etc., 1.36.

En la Gran Vía, comenzaba la maratón y la media maratón de Billbao. En la salida, el mismo ambiente -se repitió el olor a Reflex-, aunque con menos gente. La temprana hora no invitava mucho y faltó hasta la lluvía, que estaba inscrita.

Al adormecerme, todavía me viene a la mente la sensación de avance constante y demoledor. Los primeros Kilometros nos acompañó nuestro amigo Iñaki, hasta que nos dijo «seguid, yo bajo el ritmo, nos vemos en la meta». Desde aquí, un abrazo.

Para la próxima, prometo estudiarme al detalle la ruta, pues hubo una acera que resultó acabar en trampa, como debí imaginarme -no tenía rebaje-. Fue necesario parar el crucero para quitar el antivuelco. Justo despues,  curvón a izquierdas y bajada vertiginosa donde un corredor, con su dorsal y sus posibilides de hacer un prestigioso tiempo, no dudó en ayudarnos a retener la sillla hasta que otro que no competía se insistió en sustituirle.

Las cuestas eran de espanto, como murallas; pero, la energía, para mí, inimaginable de Super Rober junto con el espiritu de esfuerzo, sacricifio y algún componente más que desconozco, lograron despertar admiración y aplausos. Durante el último tramo pude percibir su empeño por lograrlo a toda costa, llegando a Erandio.

Esta vez, con la carzasa sequita, sequita hemos grabado nítido hasta que la GoPro salió volando y nos hizo parar el «carro».

Conclusión, puesto 19. Amazing