AUTONOMIA PARA DERRAPAR: MAGNÍFICO VIDEO


Como relaté en mi escrito “Curvas Peligrosas”, hace un par de años, mi afición por el mundo del automóvil me lleva acompañando desde bien pequeñito. Leyendo revistas especializadas, escudriñando cada modelo que veía pasar por la calle o montándome en todos los coches que tenía oportunidad de hacerlo.

Hace no muchos meses, supe de un circuito, llamado Kotarr, situado al sur de la provincia de Burgos. Lo que me llamó la atención de él fue que, entre sus múltiples actividades, ofrecían una “titulada” Taxi Drift, que consiste en ocupar el asiento del copiloto junto a un experto en el arte del derrapage controlado. Como comprenderéis, automáticamente esta idea fue añadida a mi lista de vivencias pendientes de realizar.

Sin embargo, su permanencia en este registro ha sido mucho más corta de lo que yo me temía, porque el pasado 21 de Agosto lo abandonó para pasar a formar parte de mi patrimonio de experiencias y recuerdos más valorados, que aquí pretendo reproducir.

De nuevo gracias a Roberto y Paola, conseguí acudir al circuito Burgalés, habiendo reservado cita previamente para entrar en pista y marcarnos unos “crusaitos”.

Al llegar, estaba a punto de iniciar una tanda de motos, por lo que aprovechamos para verlas en los Boxes y subir a la terraza desde donde hay una magnífica visión de casi todo el trazado (solo se pierde la segunda curva). Por cierto, para alcanzar esta altura no queda más remedio que enfrentarse a unas escaleras, pero gracias a mi magnífica compañía y a las voluntariosas personas que por allí se movían, no significó problema alguno. El hecho de ver unas obras me hace pensar que esto lo cambiaran en un futuro. Al igual que el W.C. que tampoco está adaptado.

Por fin, las motos entraron y salió a pista un 205 de rally con un piloto que luchaba y se defendía muy bien de las desventajas que supone la tracción delantera cuando toca realizar una conducción espectacular. Yo no sabía a quien encomendarme para que no me asignaran ese gran clásico con un magnífico palmarés. Yo lo que deseaba era un todo atrás.

Y hubo suerte. Ya teníamos hora: A las 13:20 salís. Fueron 40 minutos larguísimos bajo la sombrilla que nos protegía del sol de Castilla.
Con la cuanta atrás bajamos a Boxes donde nos esperaba un BMW 320i de segunda generación. El mismo que vi. expuesto a la entrada del circuito y el que había efectuado las cruzadas más brutales que había divisado desde arriba minutos antes.

Personalizado con un carácter Racing –que no tuneado-, este, en principio, modesto modelo daba mucho de sí. Había sido sometido a una cura de adelgazamiento, eliminando el asiento trasero, el guarnecido del techo y varios embellecedores interiores. El asiento del piloto era sustituido por un baquet que sintonizaba con el estilo de volante y palanca de cambios.

Con mis rodilleras que utilizo para hacer tope con la guantera, y así, no escurrirme, me coloqué en el habitáculo y entró Alberto, un genial piloto.

Uno no tiene referencias para comparar nada en semejantes condiciones, pero la verdad es que el longevo seis cilindros de dos litros tiraba como un demonio. Tras ir charlando durante unas cuantas curvas mientras se calentaba, Alberto dijo: Vamos a empezar.
Y ahí comenzó la montaña rusa en 2D. Haciendo deslizar la zaga con absoluta naturalidad. Cruzando el Serie 3 antes de entrar en las curvas, enlazando eses con la trasera desbocada. Cuando parecía que resultaba imposible coger el siguiente giro, se inventaba un bandazo con el fin de colocarlo en su sitio. Jamás olvidaré eso y la sensación de avanzar auténticamente de costado en recta después de salir de una curva para, con otra maniobra magistral, ponerse a evolucionar del otro costado.
Ah! Y todo esto sin pedir sopitas al freno de mano. Todo a base de un baile de claque con los pies y conjugando potencia y diferencial. Algo solo al alcance de los verdaderos Top Drivers.

De todas formas, para entenderlo mejor nada como unas buenas imágenes con las que volvemos a demostrar que con asistencia personal los límites se reducen en gran medida.
De ello, no cabe duda alguna al ver este fantástico video realizado por Producciones InfoServid, del que me siento orgullosísimo de protagonizar.

Para terminar, quiero comentar lo bien adaptadas que encontré las calles de Aranda de Duero, con rebajes por todas partes. Algo que tuve oportunidad de comprobar cuando, despues de lograr nuestra misión, fuimos a por un cordero lechal. La accesibilidad hubiera sido de diez, de no ser porque el WC del asador donde nos lo zampamos no estaba adaptado.

 

4 comentarios sobre “AUTONOMIA PARA DERRAPAR: MAGNÍFICO VIDEO”

  1. No dejes de luchar Diego . Eres todo un ejemplo de superación y sobre todo que la sociedad vea que las personas con movilidad reducida también tenemos ilusiones y sobre todo queremos nuestro estar en el lugar que no corresponde en la sociedad, un lugar que nos dignifique por lo que somos seres humanos..

Los comentarios están cerrados.